Las últimas declaraciones del ministro Iceta han causado gran conmoción en el colectivo del profesorado interino.
Cuando este colectivo estaba esperando por una solución para estabilizar su situación, injustamente creada por las administraciones educativas, el único globo sonda que se manda desde el ministerio es limitar la interinidad a los tres años con todos los interrogantes que esto supone.
Después de tres años se cesa y después ¿qué pasa?. Debemos recordar que en el colectivo interino docente cesamos todos los 30 de junio debiendo elegir destino cada curso. ¿Cómo se aplicaría esta norma en educación? ¿Alguien que ya ha trabajado 3 años no podría trabajar más?. La solución del ministro no solo no soluciona nada, sino que crea una gran incertidumbre en el colectivo.
Desde Docentes por la Pública ya hemos planteado en múltiples ocasiones nuestra propuesta para estabilizar al profesorado interino y reducir la temporalidad sin expulsar a los que han ejercido de docentes.
Por una parte una propuesta ideal y de máximos que consistiría en que en cada especialidad se repartiesen las plazas a partes iguales entre un acceso por concurso-oposición y un acceso por concurso de méritos.
En este último, más beneficioso para el profesorado interino, aunque abierto a todo el mundo que cumpla los requisitos, debería puntuar con al menos 1 punto, en un baremo de 10 puntos, cada año de experiencia en el mismo cuerpo, siendo muy inferior la puntuación en otros cuerpos o en el ámbito privado, para evitar una promoción interna automática y crear una estabilización de personas.
Como propuesta de mínimos exigimos una transitoria durante 6 años en los mismos términos que la transitoria 17 de la LOE con algunas mejoras:
-Eliminación de la parte práctica.
-Fijación de un tiempo máximo de examen en la parte teórica de hora y media.
-Exámenes no eliminatorios en la fase de oposición.
-Puntuación máxima a la fase de concurso, en la que se prime especialmente la experiencia en el mismo cuerpo.
Estas propuestas sí dan un respuesta clara y diáfana al profesorado interino que busca con ansia su estabilidad, especialmente en un año como el actual en el que el nivel de interinidad se ha incrementado notablemente, así como la carga mental del profesorado obligado a presentarse a unas oposiciones muy a su pesar, que no se realizan en las mejores condiciones ni mentales ni sanitarias.
Es por ello que pedimos al ministerio que dé soluciones claras y concretas al profesorado interino y que estas no se reduzcan a enviar globos sonda de los que se puede deducir que se elimina al profesorado interino para acabar con la interinidad.